martes, 22 de diciembre de 2009

PARA POLITICOS NULOS VOTOS NULOS


el
Bloque por el Socialismo Revolucionario
Manifiesta
al pueblo de Chile
su
posición política ante las elecciones
parlamentarias y presidencial:


1. Se manifiesta una crisis ascendente del capitalismo,acompañado con
la descomposición de su aparato estatal, sus partidos políticos. Un
Chile dependiente, saqueado y ...pisoteada su soberanía

2.
Nos conducen a una nueva juerga electoral. Farándula que tiene como uno
de sus objetivos, encubrir la situación que viven millones de chilenos
y chilenas, tratando de disfrazar el descontento popular que se revela
enla cesantía, bajos salarios, sobreexplotación, miseria y
degradación humana

3. Estos comicios tiene como función y
especialidad hacernoscreer, confiar y venerar las estructuras estatales
burguesas, como la Cámara de Diputados, Senado y Gobierno. Nos convocan
a sufragar en Diciembre y nos señalan que estos venerables candidatos
resolverán nuestras necesidades fundamentales.

4. Repudiamosa
esta casta política; a estos traficantes de conciencia que imponen a los
ciudadanos candidatos que ellos determinan y que serán lostriunfadores.
Estos mercaderes señalan que el pueblo no debe razonar,sólo votar.
Parareforzar este contrabando incluyen en sus listas a
“representantes sociales” para hacerles confiar a las personas que
también pueden estaren estos eventos burgueses esperando “mejoras”. La
campaña electoral está puesta en el mercado. Hoy todos los candidatos
son amigos del pueblo.

5. Despreciamosestas formas burguesas de
hacer política. Denunciamos el uso y abuso desus medios de comunicación
de masas que agencian domesticando conciencias para que sean parte de
estas farsas electorales y, peor aún, induciendo a los ciudadanos y
ciudadanas para que se sientan parte de aquellos que los oprimen y
explotan.

6. Comprendemos la realidad que vive nuestro pueblo y
como se encuentran sus organizaciones sociales y políticas.Señalamos
que tenemos una enorme responsabilidad de fortalecerlas y
proyectarlas en un Frente Común con plataforma, línea y métodos de lucha
contra los capitalistas, sus administradores y sus estructuras
represivas.

7. Nuestra posición no responde a ninguna postura
dogmática, sectaria o ultraizquierdista. Las elecciones deben ser
orientadas a enriquecer la causa revolucionaria, a la liberación de los
trabajadores y su pueblo.
Para el Bloque por el Socialismo
Revolucionario
los procesos electorales (Parlamento-Ejecutivo) son sólo
una táctica, que debe contribuir a una línea política de la Revolución
Socialista.

8. En estas elecciones 2009 estamos ausentes con
Parlamentarios y Presidente que representen a los trabajadores de Chile.
La pugna por el control del poder político se manifiesta por los
sectores que defienden los intereses del imperialismo asociados con la
burguesía “Nacional” proyanqui, y corrientes reformistas con propuestas
de desarrollo nacionalen el marco del capitalismo. No hay opción
posible, nadie representa nuestros intereses, ni en la primera vuelta ni
mucho menos en la segunda vuelta. Ambas son para elegir neoliberales.

9.
En Chile no hay soberanía popular, no hay democracia participativa.
Nuestro pueblo debe repudiar esta farsa electoral. En diferentes formas
decimos que es más responsable y consecuente ¡¡votar nulo, en blanco o
novotar!!

10. Decisión que anuncia el rechazo de los electores a la politiquería sucia, a las cúpulas
que imponen candidatos, a los que pisotean principios coludiéndose en
pactos por omisión, representados en un colaboracionismo de clase
despreciable.

11. Ningún voto para los neoliberales de la
Concertación (PDC – PS – PPD – PRSD). Ningún voto para el Juntos
Podemos + Arrate, Coludido con los capitalistas neoliberales de la
Concertación y
con ansias de maridaje para la segunda vuelta, induciendo al pueblo
aser cómplice de un candidato que garantiza los planes capitalistas
e imperialistas como Frei.
Ningún voto para el MEO que baila al ritmo
delreguetón neoliberal.
Ningún voto para la Alianza por Chile (UDI-RN), hijos del
pinochetismo, de la Dictadura militar burguesa, del neoliberalismo,
de
la cultura de la muerte, del Opus Dei.

12. ¡Basta! A repudiar a todos aquellos que nos arrastran a votar por el menos malo o por el llamado voto útil.

13.
Debemos seguir impulsando las acciones de las fuerzas sociales
y
mas que
nunca denunciar y deslegitimar esta estructura del poder capital.
El
centro de las decisiones deben estar afuera de estos establos patronales.
Deben estar en la población
en las industrias
liceos
universidades
en las comunas; desarrollando poderes populares
al
calor de la
movilización
protesta
y
lucha callejera

" POR EL SOCIALISMO SIEMPRE "
VENCEREMOS
B x S R

http://www.youtube.com/watch?v=JP9JCehbby8&feature=player_embedded

ANULAR Y REBELARSE


Los
gobiernos de la Concertación
profundizaron las privatizaciones, convirtiendo al país en un gigantesco mall.
Todo se comercializa y tiene precio, entre otros la educación, la salud, la previsión.

No. Definitivamente esta realidad que se pudre no la crearon los pobres de Chile. No la crearon sus pueblos vilipendiados. No la creamos los ofendidos. Que ellos, los dueños del poder, se las arreglen solos para resolver sus diferendos. Mejor aún, que se vayan del poder y lo dejen en manos del soberano, el pueblo.



El resonante triunfo de la derecha en la contienda presidencial golpeó a la Concertación y sus aliados. Ahora todas las fuerzas en disputa se alinean y preparan las condiciones para lo que consideran una batalla decisiva. Pero los verdaderamente marginados y excluidos, los más explotados y perseguidos poco o nada tienen que ver con el escenario actual. El 47% de las chilenas y chilenos en edad de votar no se inscribieron, no votaron o entregaron su voto en blanco o anulado, demostrando su desconfianza y repudio al sistema electoral impuesto por la dictadura.

El que todavía gravite una derecha pujante, a 19 años de la salida del dictador desde La Moneda, es resultado del pacto entre la Concertación y la cúpula político empresarial del militarismo, cuando el bloque oficialista vendió su alma a cambio de las cuotas de poder que ha ostentado los últimos 20 años. Cuotas de poder a cambio de mucha impunidad respecto a los violadores de los derechos humanos, a cambio de mantener las mismas Fuerzas Armadas que ejercieron la dictadura, con pequeñas modificaciones de estilo, pero sin cambio alguno en la esencia.

Cuotas de poder a cambio de desmovilizar al pueblo organizado que se alzaba contra el tirano. Cuotas de poder negociadas en reuniones efectuadas en Washington y en la embajada de EE.UU. en Chile, por algunos conspicuos personeros de la entonces naciente coalición oficialista, a mediados de los años ochenta. Cuotas de poder y posibilidades de lucro personal a cambio de cogobernar con los grandes grupos económicos nacionales y transnacionales. Cuotas de poder a cambio de no tocar las leyes secretas de la dictadura. Cuotas de poder, a cambio de no terminar para siempre con la Constitución de 1980.

Por esos pactos secretos debieron rescatar al dictador de la justicia internacional y mantener la protección a centenares de autores directos, encubridores, cómplices y autores intelectuales de miles de crímenes de lesa humanidad. Han llevado a los trabajadores a las condiciones laborales imperantes a comienzos del siglo XX. Hoy la inmensa mayoría de quienes viven de un salario debe laborar un promedio de 12 horas diarias para acceder a un sueldo de subsistencia familiar. No se cumplen los convenios internacionales de protección, como el 87 y 98 de la Organización Internacional del Trabajo, que garantizan el derecho a sindicalizarse libremente, a negociar colectivamente y a ejercer la huelga.

Los gobiernos de la Concertación profundizaron las privatizaciones, convirtiendo al país en un gigantesco mall. Todo se comercializa y tiene precio, entre otros la educación, la salud, la previsión.

No. Definitivamente esta realidad que se pudre no la crearon los pobres de Chile. No la crearon sus pueblos vilipendiados. No la creamos los ofendidos. Que ellos, los dueños del poder, se las arreglen solos para resolver sus diferendos. Mejor aún, que se vayan del poder y lo dejen en manos del soberano, el pueblo.

Por todo lo señalado, el Consejo Nacional de Comités Comunistas mantiene su llamado a votar nulo en segunda vuelta. El pueblo no es responsable de los pactos y juegos espurios entre los bloques y grupos de poder. Los trabajadores y pueblos de Chile deben, por su parte, organizarse y luchar en forma inmediata por la defensa de la Educación Pública, por la renacionalización de la minería del cobre y de los servicios básicos, por un salario mínimo de $350.000, por una Asamblea Constituyente que dé origen a una nueva Carta fundamental.

El resultado electoral del pasado domingo 13 de diciembre, ha consagrado el pacto que lapidó el proyecto político revolucionario erigido por Luis Emilio Recabarren a comienzos del siglo XX y entregó, atada de pies y manos, la organización que impulsó la Rebelión Popular de Masas contra la dictadura. Ya no es cuestión de nombre, ni de símbolos, es asunto de esencia y carácter, porque el resultado de la contienda electoral consolidó el mayor triunfo del sistema electoral binominal.

Con la incorporación de tres diputados representativos del viejo partido comunista, está claro que lejos de haber derrotado al sistema binominal y la exclusión, se confirmó todo lo contrario. La presencia en el parlamento de diputados identificados con esa organización, expresa el éxito del sistema que dicen combatir los elegidos. En los hechos, la vieja colectividad consolidó un proceso de integración al bloque oficialista y acepta a plenitud la institucionalidad vigente. Estos parlamentarios no podrán obrar como lo dijera Recabarren en su célebre texto: “Los representantes comunistas en el Parlamento”, escrito en abril de 1922, donde enuncia: “El objeto que nos lleva al Parlamento, a la Cámara de Diputados o al Senado, es única y exclusivamente conquistar una posición más para nuestra propaganda revolucionaria, antiparlamentaria, anticapitalista, y de ataque directo al estado burgués y a sus instituciones decrépitas.

Un representante comunista no va al Congreso a hacer política, a cooperar con los burgueses, a pedir empleos, a mendigar sueldos, o a intrigas entre pasillos.

El parlamentario comunista investido de la representación de un partido serio que encierra en sí las aspiraciones y la voluntad de las masas ya no sumisas; va a la Cámara a destruir, a despedazar con su crítica libre y severa, la dialéctica jesuítica y sofística, de los representantes burgueses; y a iluminar, con el resplandor de la doctrina comunista los problemas vitales que nos acosan.

El representante comunista en la Cámara, sigue siendo antiparlamentario, sigue combatiendo el parlamentarismo; y sus ideas en el Congreso, no difieren de las que expresara en vísperas de elecciones, y en su vida privada, ante sus electores”.

Nada de ello son y serán los parlamentarios del antiguo partido comunista. Especialmente cuando se redujo a la vieja organización a su más mínima expresión orgánica y capacidad para encabezar las luchas sociales por las demandas más sentidas de nuestro pueblo. Peor aún, cuando los trabajadores han sido testigo de como los dirigentes sindicales leales al aparato de dirección, bajaron la huelga de los subcontratistas de CODELCO, para no hacerle olitas al gobierno y no afectar el pacto con la Concertación. O con el más reciente paro de los trabajadores forestales, donde en doble instancia, la Confederación Nacional de Trabajadores Forestales, presidida por un integrante del Comité Central de la colectividad, afiliado a la estadounidense AFL-CIO, primero bajó un paro y luego se abocó a descalificar a los trabajadores que lo retomaron por encima de la mesa en que negociaba la CNTF.

Carmona y Tellier resultaron electos por efecto del pacto con la Concertación (no así el compañero Hugo Gutiérrez, que triunfó a pesar de que desde la cúpula del aparato no recibió ayuda alguna), pero no lograron doblar en sus distritos. Para lograr su meta, junto al resto de la cuadrilla, liquidaron gradualmente la organización, en un proceso que comenzó a mediados de los años ochenta con medidas para desmovilizar al FPMR, el paulatino desarme y desarticulación de toda capacidad de lucha armada; pero además la instauración de una incondicional red de dirigentes sindicales que han sofocado todo atisbo de lucha en cada frente que les ha sido posible.

La presencia de ambos parlamentarios tuvo y tiene un elevado costo que no vacilaron en pagar y comprometen a toda la organización. Ahora ya no están excluidos en forma personal. Ahora cuentan con un lugar en el banquete. Los trabajadores y el pueblo, poco o nada pueden esperar de ellos.

Junto con eso, el viejo partido arriesga perder su legalidad pues no eligió 4 parlamentarios ni mantuvo el 5% de los votos, como lo exige el Servicio Electoral, aunque buscan leguleyadas para no desaparecer, como la inscripción de un “partido de los trabajadores” para fusionarse, presidido por el abogado Pedro Aravena de conocido prontuario antitrabajadores en ICAL, ARCIS, Radio Nuevo Mundo y El Siglo, o una apelación que les permita algún tiempo para reinscribir el partido con firmas “nuevas” que se hacen en las oficinas del CC.

Más que nunca ha quedado en evidencia la ruptura de la cúpula dirigente del viejo partido comunista con los principios fundacionales de la organización. Sólo pretenden conservar la marca para beneficio de sus operaciones, pero nada tienen que ver con la razón de ser de la organización comunista, que es hacer la revolución, terminar con el capitalismo, construir el socialismo y finalmente la sociedad sin clases del comunismo. Estas son las ideas por las que cayeron centenares de compatriotas, comunistas ejemplares, cuyos nombres son enarbolados por estos aprendices de mercaderes de la política para lograr mezquinas prebendas. O quizás para servir a un amo desconocido, pero fácil de adivinar.

Los comunistas seguimos de pie. Más comprometidos que nunca, organizados en Consejos y Comités. En esta naciente organización vive el apego a los principios, la lealtad incondicional al pueblo y los trabajadores, expresada en la Política de Rebelión Popular de Masas, que consideramos corresponde –actualizada de acuerdo al escenario vigente- al camino más decidido para la emancipación de los explotados. Aquí tienen su espacio los miles de compañeros que desencantados por la conducta vergonzante de la cúpula partidista se han quedado a la orilla del camino. Sabemos que hay más grupos de comunistas reflexionando, dentro y fuera del mal llamado partido comunista dirigido por un grupo que hace años dejó de serlo. Todos ellos caben en los Comités Comunistas y sus Consejos. Con todos debemos construir este nuevo espacio de los Comunistas que aun sueñan, organizan y luchan para transformar profundamente nuestra patria. A todos estos Comunistas invitamos a unir voluntades y esfuerzos para caminar, junto a otros revolucionarios, en pos de levantar la alternativa de los pueblos y los trabajadores.

A 26 años del primer apagón nacional que iluminó la rebelión popular expresamos, más convencidos que nunca, que el único camino de la liberación se abre junto al pueblo, confiando en él, entregándole el poder al soberano.

El único derecho que le queda al pueblo es el derecho a rebelarse frente a toda injusticia.


Unidad y lucha para transformar la patria.

¡Con la razón y la fuerza, venceremos!


Consejo Nacional de Comités Comunistas

Santiago, diciembre 14 de 2009.
A 26 años de la aparición pública del FPMR